Seguramente has escuchado estas palabras más de una vez, pero ¿sabes en qué consisten y por qué es importante llevar un control estricto de los niveles de estas sustancias en la sangre?

Decidimos responder tus dudas sobre la mejor forma de cuidar uno de los órganos más importantes del cuerpo: el corazón. Y es que el colesterol y los triglicéridos son fundamentales para lograrlo, ya que éstos evitan o detonan las enfermedades cardiovasculares (ECV), que cada año cobran la vida de 17.3 millones de personas en el mundo.

Colesterol

Se trata de una sustancia transparente y grasosa, producida por el hígado y presente en la sangre; sirve como protector del sistema nervioso y fabrica tejidos celulares y ciertas hormonas, por lo que es elemental para el correcto funcionamiento del cuerpo. Además, se obtiene de alimentos, como el huevo, la carne y los lácteos.

No obstante, el exceso de esta sustancia se adhiere a las paredes de las arterias hasta obstruirlas o ensancharlas, lo que propicia un gran número de ECV.

Es aquí donde surgen dos términos más: a) Colesterol Bueno y b) Colesterol Malo.

a) Se define así a las lipoproteínas de densidad alta (HDL) y se encarga de extraer el colesterol del torrente sanguíneo. Aunque es generado por el organismo, puede producirse con la ingesta de alimentos ricos en fibra y bajos en grasa, y con la práctica de ejercicio.

b) O de baja densidad (LDL); se acumula en las venas, formando una placa que dificulta la circulación de la sangre. Aumenta con las dietas basadas en grasas de origen animal y embutidos.

Triglicéridos

Son el segundo tipo de grasa en la sangre, presente también en el tejido adiposo, generado en el hígado y resultante de un proceso en el que el cuerpo transforma en triglicéridos el exceso de calorías, proteínas y carbohidratos consumidos. Son transportados por el sistema circulatorio o bien almacenados como grasa.

Al igual que el caso anterior, el exceso de estas sustancias amplía las probabilidades de que las arterias se endurezcan y estrechen, creando coágulos, por lo que el aumento de los triglicéridos va de la mano con el incremento de los niveles de colesterol.

Los niveles adecuados

En términos generales, los estándares en cualquier persona sana deben ser los siguientes:

Colesterol Triglicéridos
Normal: menos de 200 unidades
Límite: 200 a 239 unidades Normal: hasta 150 unidades
Riesgo: más de 240 unidades

Al superar los valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se incrementan considerablemente las posibilidades de padecer:
• Infartos
• Ataques cerebrales
• Diabetes
• Obesidad
• Insuficiencia renal
• Trombosis
• Ateroesclerosis

La solución
La principal estrategia para evitar los niveles elevados de colesterol y triglicéridos en la sangre es la prevención, que puedes alcanzar a través de sencillas acciones:
• Reducir el consumo de sal, azúcar y grasas saturadas (pan, papa, pastas, levaduras, cereales, mantequilla).
• 30 minutos de ejercicio diario (nadar, caminar, andar en bicicleta).
• Subir la ingesta de frutas y verduras, así como de pescado.

Numeralia

• Se espera que para 2030, 23 millones de personas mueran al año a causa de las ECV.

• La obesidad afecta a 300 millones de adultos en el mundo.

• Llevar un estilo de vida saludable disminuye 14 años la edad biológica, en comparación con la edad cronológica.

• La OMS recomienda hasta 10 000 pasos al día; los mexicanos suelen dar, apenas, 5 000.

Fuentes: Federación Mundial del Corazón, Universidad de Cambridge, OMS, Secretaría de Salud.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *